Un hecho insólito ocurrió en el Hospital II Huánuco de EsSalud, cuando un bebé de apenas dos años expulsó una lombriz intestinal de más de 40 centímetros, tras acudir a la emergencia por dolor abdominal y sangrado en sus deposiciones. El pequeño, que presentó síntomas severos, fue llevado al centro de salud por su madre, preocupada por el cuadro clínico de su hijo.
El doctor Víctor Rosas Manzano, pediatra del hospital, explicó que tras una evaluación exhaustiva, los médicos identificaron que el menor estaba afectado por Ascaris lumbricoides, un parásito intestinal alargado, comúnmente conocido como lombriz intestinal. Según el especialista, el parásito fue encontrado en el pañal del niño, con una longitud que superaba los 40 centímetros.
“Se brindó atención inmediata, realizamos los análisis de laboratorio y administramos el tratamiento adecuado para asegurar la recuperación del menor”, detalló el doctor Rosas.
El médico advirtió que el Ascaris es un parásito que puede adquirirse al entrar en contacto con tierra contaminada por heces humanas o animales, especialmente en áreas con condiciones de higiene deficientes, como las que suelen frecuentar los niños. Además, el mal lavado de los alimentos es otro factor que aumenta el riesgo de contagio.