La Fiscalía ha solicitado una condena de 20 años y seis meses de prisión para el expresidente Alejandro Toledo, acusado de ser el presunto autor de los delitos de colusión y lavado de activos en perjuicio del Estado peruano, en el marco del caso Odebrecht. Este proceso judicial está relacionado con las irregularidades en la concesión de la carretera Interoceánica Sur.
Hoy se llevó a cabo una nueva audiencia en el juicio oral contra Toledo, en la cual fue interrogado por el fiscal José Domingo Pérez. Durante su declaración, el exmandatario negó haber sostenido reuniones reiteradas con Sergio Bravo Orellana en el Palacio de Gobierno, quien fue involucrado en los presuntos actos de corrupción. En cuanto a las reuniones con Jorge Barata, Hernando Graña Acuña, Fernando Castillo Dibós y otros representantes de Capeco, Toledo mencionó no recordar haber participado en dicho encuentro.
El juicio oral contra Toledo está llegando a su fase final, y las decisiones que se tomen en los próximos días serán cruciales para definir su futuro legal. La defensa del expresidente sigue sosteniendo que es inocente de los cargos imputados.