Las altas temperaturas en Ica han cobrado su primera víctima mortal por golpe de calor. Jim Choy Quispe (46) falleció en el Hospital Regional de Ica, donde los médicos diagnosticaron su muerte como resultado de una «disfunción multiorgánica, consecuencia de un shock distributivo y, fundamentalmente, un golpe de calor».
Este trágico suceso destaca la seria amenaza que representan las olas de calor para la salud pública en la región. Con temperaturas que superan los 35°C y generan una sensación térmica que podría superar los 40°C, los individuos vulnerables, especialmente aquellos con condiciones de salud preexistentes, enfrentan riesgos significativos.
El informe médico reveló que, además del golpe de calor, Choy Quispe padecía de «hepatopatía crónica debido al alcoholismo», lo que podría haber agravado su condición y contribuido a su fallecimiento.
Fuente: La lupa