El Congreso de la República aprobó una nueva ley que regula el uso de celulares en los colegios, con el objetivo de reducir las distracciones en las aulas, mejorar el rendimiento académico y proteger a los estudiantes de riesgos como el ciberacoso. La medida, impulsada por la parlamentaria Milagros Jáuregui, no prohíbe del todo los dispositivos móviles, pero limita su empleo a fines educativos y bajo la supervisión de los profesores.
«Hoy entran al colegio con el celular y se distraen. No atienden las clases y están vulnerables a ciberataques», señaló Jáuregui, quien destacó que iniciativas similares en otros países han demostrado resultados positivos en el aprendizaje.
¿Cómo se aplicará la ley?
El Ministerio de Educación (Minedu) será el encargado de establecer los criterios para el uso de celulares en las aulas. Los docentes podrán autorizarlos en actividades pedagógicas, como investigaciones o proyectos que requieran internet, siempre dentro de un plan estructurado.
El ministro Morgan Quero confirmó que, en un plazo de 60 días, se publicará un reglamento con lineamientos claros para evitar decisiones arbitrarias y adaptarse a las realidades de cada región y escuela.
Sanciones y medidas de control
El reglamento permitirá a los maestros retirar los celulares a los alumnos que los usen sin permiso. Los dispositivos serán guardados de manera segura hasta el final de la jornada. La medida busca frenar el uso indebido de estos aparatos y prevenir problemas como el cyberbullying o el acceso a contenido inapropiado.
Quero aclaró que los celulares no serán satanizados, pues durante la pandemia fueron clave para la educación virtual. «Su potencial no será descartado, sino canalizado hacia un uso responsable y formativo», afirmó.
Capacitación y participación de padres
Como parte de la implementación, el Minedu anunció un plan de capacitación para docentes y directores, en alianza con universidades públicas. Además, se promoverá el uso ético de la tecnología entre estudiantes y se involucrará a los padres de familia para garantizar la seguridad y el desarrollo académico de los escolares.