Han pasado 19 días desde que se decretó el estado de emergencia en Lima y Callao, una medida que buscaba frenar el incremento de la delincuencia. Sin embargo, hasta la fecha, 23 personas han sido asesinadas, principalmente debido a actos de sicariato y extorsión. De estos crímenes, 10 ocurrieron en distritos bajo la medida de emergencia, incluyendo Lurigancho, Ate y el Cercado de Lima.
A pesar de las restricciones, los crímenes continúan. Un caso reciente es el asesinato de Víctor Meneces Montoro, de 32 años, quien fue acribillado con cinco disparos, y antes de huir, el delincuente le robó su celular. Otro trágico ejemplo es el ataque ocurrido en Comas, donde un extorsionador disparó contra un bus de la empresa de transportes Urano Tour, hiriendo al conductor en el hombro.
Estos hechos evidencian que el sicariato sigue ganando terreno a pesar del estado de emergencia. Los asesinatos continúan en aumento, y con 1,493 homicidios registrados en lo que va del año, Perú ha superado la cifra del año pasado, que fue de 1,431. La violencia no se detiene, y la inseguridad sigue afectando a la población.