Con un gol solitario de Alex Valera, Universitario de Deportes derrotó 1-0 a Sporting Cristal en el Estadio Nacional, en el partido correspondiente a la jornada 14 pendiente del Torneo Clausura. Este triunfo acerca de manera tangible al cuadro crema a la consecución del tricampeonato nacional, una hazaña que podría sellarse este mismo fin de semana.
El encuentro, disputado con intensidad, tuvo a un protagonista claro: Sebastián Britos. El guardameta visitante fue la gran muralla que frustró repetidas ocasiones del dominio celeste, manteniendo su valla imbatida. La efectividad crema, en cambio, se materializó en una única y letal jugada. Alex Valera, aprovechando un breve desliz de la defensa, superó a Luis Abram y definió con precisión para batir a Diego Enríquez, decidiendo el partido.
A un paso de la gloria
Con este resultado, Universitario, comandado por el técnico Jorge Fossati, afianzó su liderato en el Clausura con 36 puntos, colocándose a diez unidades de su inmediato perseguidor, Cusco FC. La consecución del título, y con él el tricampeonato, es ahora inminente y presenta dos escenarios posibles.
El primero podría darse incluso sin que el equipo dispute un solo minuto. Este sábado, Cusco FC debe recibir a Atlético Grau. Un tropiezo de los cusqueños coronaría automáticamente a Universitario como campeón del Torneo Clausura y, por consiguiente, como tricampeón nacional.
Si el escolta gana, la oportunidad estará en manos del equipo de Fossati el domingo 26 de octubre, cuando visite al ADT en el Estadio Unión de Tarma. Un triunfo en esa ciudad les daría el título de manera matemática.
Una hazaña histórica en ciernes
De concretarse el campeonato este fin de semana, Universitario igualaría la gesta del bicampeonato logrado entre 1998 y 2000 y, lo que es más significativo, se convertiría en el primer club en alcanzar un tricampeonato bajo el formato de la Liga 1, escribiendo una nueva página dorada en su centenaria historia.
La expectativa entre la hinchada crema es máxima. Mientras miles preparan su viaje a Tarma para alentar al equipo, en Lima ya se organizan caravanas y celebraciones anticipadas, a la espera de un hito que está a solo noventa minutos –o un resultado ajeno– de convertirse en realidad.









