La reforma del sistema previsional tiene como objetivo garantizar que los beneficiarios accedan progresivamente a una pensión, promoviendo una mayor competencia entre gestores de pensiones, ofreciendo una pensión mínima, comisiones por resultados y un mecanismo de aportes complementario a través del consumo. Para ello, se establece un único sistema previsional basado en cuatro pilares: no contributivo, semicontributivo, contributivo y voluntario.
El pilar no contributivo, de administración y financiamiento público, está dirigido a personas que no alcanzan una pensión proporcional especial y se encuentran en situación de pobreza o vulnerabilidad, así como personas con discapacidad severa. En este caso, la ONP gestiona los pagos. El pilar semicontributivo, con administración pública y privada, otorga una pensión mínima o proporcional a quienes cumplen con los aportes necesarios, sin haber retirado fondos tras la entrada en vigor de la ley.
El pilar contributivo, también con administración mixta, se financia con aportes de los afiliados y cubre pensiones de jubilación, invalidez, sobrevivencia y gastos de sepelio. Las personas mayores de 18 años que no estén afiliadas al sistema se incorporarán obligatoriamente al SNP o SPP, siendo asignadas al SPP si no manifiestan su preferencia.
El pilar voluntario permite complementar los aportes para alcanzar una pensión mínima o proporcional. Dentro de este pilar, se introduce el aporte por consumo, calculado como el 1% de las ventas anuales de los afiliados, con un tope de 8 UIT al año y sin incluir boletas de ventas superiores a 700 soles.
Finalmente, la edad de jubilación se establece en 65 años para hombres y mujeres, con la posibilidad de acceder a una jubilación anticipada desde los 55 años.