El maltrato animal no solo incluye el abuso físico directo, sino también la negligencia, como no proporcionar alimento, refugio o atención médica adecuada. Muchos países tienen leyes que penalizan el abandono de animales, reconociéndolo como una forma de crueldad.
Permitir que los perros salgan solos sin supervisión también puede ser una forma de negligencia y se considera irresponsable, aunque no sea un abandono directo. Dejar a los perros vagar sin control los expone a múltiples riesgos como accidentes de tránsito al exponerlos a ser atropellados por vehículos, pueden contraer enfermedades o parásitos de otros animales, corren el riesgo de pelear con otros perros además de abrir la posibilidad de que se pierdan o consuman alguna sustancia tóxica.
Además, es posible que causen molestias a otras personas o dañen propiedad ajena. La tenencia responsable de mascotas implica asegurar su bienestar y su seguridad en todo momento, lo que incluye sacarlos a pasear con correa, supervisarlos y garantizar que no estén en peligro.