Un reciente estudio ha revelado que cambios en la forma del cerebro pueden anticipar la demencia hasta años antes de que aparezcan sus síntomas clínicos. Este hallazgo proviene de un análisis de más de 2.600 resonancias magnéticas, que han identificado patrones característicos de alteraciones morfológicas en el cerebro.
Los investigadores observaron una expansión en las regiones bajas y anteriores del cerebro, junto con una compresión en las zonas superiores y posteriores. Este fenómeno ha sido descrito como un «desplome» cerebral, siendo más pronunciado en individuos que ya han sido diagnosticados con demencia. Este hallazgo plantea cuestiones importantes sobre cómo se puede prever el deterioro cognitivo a partir de cambios estructurales en el cerebro.
Una de las áreas más afectadas es la corteza entorrinal, que juega un papel clave en la memoria. Este segmento del cerebro es uno de los primeros en acumular la proteína tau, la cual está estrechamente relacionada con la enfermedad de Alzheimer. La presión física generada por estos cambios de forma en el cerebro puede ser un factor que favorece el daño neurodegenerativo temprano.
El estudio enfatiza que el deterioro cerebral no solo se relaciona con la pérdida de volumen en áreas específicas, sino que también incluye modificaciones globales en la geometría cerebral con el paso del tiempo. Detectar estos cambios morfológicos a través de imágenes no invasivas podría facilitar una evaluación temprana de la demencia, permitiendo así intervenciones antes de que el deterioro sea avanzado.
Los autores del estudio subrayan la necesidad de llevar a cabo más investigaciones para comprender mejor la conexión entre estos cambios estructurales y la función cognitiva. Asimismo, destacan la urgente necesidad de desarrollar herramientas diagnósticas tempranas que puedan abordar el creciente impacto mundial de las enfermedades neurodegenerativas.
La identificación temprana de estos patrones podría revolucionar la forma en que se diagnostica y se trata la demencia, brindando la oportunidad para una intervención oportuna y, potencialmente, un mejor pronóstico para los afectados.
Fuente: Infobae