El huracán Melissa, uno de los ciclones tropicales más intensos de la temporada atlántica 2025, se formó a partir de una onda tropical el 16 de octubre y rápidamente escaló a la categoría 5, la máxima en la escala Saffir-Simpson. Después de azotar Jamaica, el fenómeno tocó tierra en el oriente de Cuba el 29 de octubre, dirigiéndose posteriormente hacia las Bahamas.
Impacto en Jamaica
Melissa impactó Jamaica la noche del 28 de octubre como un huracán de categoría 5, el más fuerte registrado en la historia reciente de la isla, con vientos que alcanzaron las 241 mph (388 km/h). La tormenta causó daños generalizados, destruyendo viviendas e infraestructuras, arrancando techos, inundando calles y colapsando servicios esenciales.
El 77% del país quedó sin electricidad y más de medio millón de personas fueron directamente afectadas. La situación humanitaria es grave; Jamaica fue declarada zona de desastre, registrándose al menos ocho muertes y miles de personas buscando refugio en albergues. La Cruz Roja y la ONU han calificado la situación como una “catástrofe sin precedentes” y han activado operaciones de rescate y ayuda humanitaria urgente.
Impacto en Cuba
El huracán Melissa tocó tierra en Cuba como categoría 4, con vientos sostenidos superiores a 200 km/h, antes de degradarse a categoría 3 durante su trayecto. Las provincias más afectadas fueron Santiago de Cuba, Granma, Camagüey, Las Tunas, Guantánamo y Holguín. Los efectos inmediatos incluyeron inundaciones, crecidas de ríos, deslizamientos de tierra y daños estructurales significativos.
Más de 735.000 personas fueron evacuadas preventivamente y cerca de 3,5 millones de cubanos se quedaron sin electricidad. Aún se evalúa la magnitud total de los daños, que se agravan por el contexto económico y sanitario de la isla ya deteriorado. Aunque no se han reportado cifras oficiales de fallecidos, los daños materiales son severos y los servicios básicos han sido interrumpidos.
Impacto regional y ayuda humanitaria
En total, el huracán Melissa ha dejado al menos 49 muertos en el Caribe, incluyendo 40 en Haití y un fallecido en República Dominicana. Miles de personas han sido desplazadas y cientos de comunidades se han visto afectadas. La ONU y otras organizaciones humanitarias están apoyando a los gobiernos locales con la entrega de alimentos, agua y refugio, mientras que se espera que la situación crítica en Jamaica y Cuba siga requiriendo atención.
A medida que avanzó hacia el norte, Melissa se debilitó a categoría 2 y se dirige hacia las Bahamas, donde se anticipan lluvias torrenciales, vientos intensos y marejadas peligrosas.
Conclusión
El huracán Melissa ha dejado un impacto devastador en Jamaica y Cuba, reflejando la vulnerabilidad de las islas del Caribe ante fenómenos climáticos extremos. La magnitud de los daños requerirá un esfuerzo humanitario significativo para la recuperación y asistencia a las poblaciones afectadas.
Fuente: El Comercio









