Tomás Gálvez, fiscal de la Nación interino, ha confirmado que las investigaciones en su contra, relacionadas con el caso «Cuellos Blancos del Puerto», han sido oficialmente archivadas. Durante una reciente declaración, Gálvez desestimó las acusaciones en su contra, afirmando que carecen de fundamentos y que la pesquisa se inició en su ausencia.
El contexto de su nombramiento como fiscal interino surge tras la suspensión de la titular Delia Espinoza, acontecimiento que llevó a los dos fiscales con mayor antigüedad a rechazar asumir el cargo. La decisión de nombrar a Gálvez generó controversia debido a sus vínculos previos y las denuncias relacionadas con el escándalo de corrupción que involucra a jueces y fiscales en el puerto de Callao.
Gálvez expresó su malestar ante las continuas críticas y las versiones que lo vinculan con la presunta organización criminal. En sus declaraciones, subrayó que las denuncias constitucionales en su contra fueron archivadas por falta de pruebas contundentes, lo que refuerza su postura de que no se encuentra involucrado en la trama de corrupción.
Además de su carrera en el Ministerio Público, es importante señalar que Gálvez intentó incursionar en el mundo político, creando el partido Peruanos Unidos. Sin embargo, decidió renunciar a esta aventura política para retomar su labor como fiscal, donde ha enfrentado numerosos desafíos desde su nombramiento.
En resumen, el fiscal interino Tomás Gálvez ha minimizado las críticas y reafirmado que el proceso en su contra sobre «Los Cuellos Blancos del Puerto» fue cerrado, sin hallamientos que lo incriminen. Su declaración ha dejado clara su intención de continuar su trabajo en el ámbito judicial, a pesar de la controversia que lo rodea.
Fuente: Éxitosanoticias









