Un trágico caso de presunta negligencia médica ha sacudido la región Junín, tras la muerte de Kendy Romero Puente, una reconocida empresaria de 42 años. Romero, propietaria de la cadena Podosalud, falleció el pasado 24 de agosto tras someterse a una liposucción en una clínica.
De acuerdo con los reportes, Romero ingresó al consultorio del Dr. Fidel Bernaola alrededor de las 8:00 a.m. para someterse al procedimiento quirúrgico. Aunque inicialmente la operación parecía haberse realizado con éxito, su estado de salud comenzó a deteriorarse rápidamente poco después de la intervención.
Familiares de la empresaria relataron que Romero, quien estaba consciente en la sala de recuperación, empezó a sentirse mal y se desvaneció mientras conversaba con su pareja, Jhonson Bravo. Según los testimonios, la paciente preguntó a las enfermeras sobre los medicamentos administrados y recibió la respuesta de que era una reacción normal, instándola a no dormirse.
Sin embargo, el deterioro de su condición generó una creciente preocupación entre el personal de la clínica, quienes aparentemente no supieron cómo manejar la emergencia. Los familiares denunciaron que en lugar de una respuesta médica adecuada, presenciaron discusiones entre los médicos sobre la gravedad del caso. Finalmente, Romero fue trasladada al Hospital Carrión cerca del mediodía, bajo la supervisión del mismo cirujano. Llegó en coma y, lamentablemente, falleció minutos después.
La familia de la fallecida ha exigido una investigación exhaustiva sobre el caso, alegando que la clínica no contaba con el equipo ni el personal necesarios para enfrentar una emergencia de esta magnitud. Acusan al Dr. Bernaola y al establecimiento de negligencia médica, solicitando a las autoridades que se tomen las medidas correspondientes para esclarecer lo sucedido.