El ahorro energético se ha convertido en una preocupación creciente para muchas familias, especialmente cuando se trata de controlar los costos asociados con el consumo eléctrico. Según un reciente informe de la Agencia Internacional de Energía, hay un electrodoméstico en particular que podría estar disparando tu factura de electricidad sin que te des cuenta: el aire acondicionado.
El estudio revela que el aire acondicionado es uno de los mayores consumidores de energía en el hogar, incluso cuando está enchufado pero no en uso. Este aparato puede consumir entre 3000 y 3500 vatios por hora, dependiendo del modelo y su eficiencia. Las unidades de ventana, aunque más económicas en comparación, aún utilizan entre 900 y 1440 vatios por hora, mientras que los modelos portátiles pueden llegar a consumir entre 2900 y 4100 vatios por hora.
Además del aire acondicionado, el informe destaca otros electrodomésticos que contribuyen al consumo de energía «fantasma» o standby, que se produce cuando los aparatos están enchufados pero no están en uso activo. Entre estos se encuentran los calentadores de agua eléctricos, que también tienen un impacto significativo en el consumo energético. Gestionar correctamente estos aparatos es esencial para evitar sorpresas desagradables en la factura mensual.
Los televisores, consolas de videojuegos y sistemas de sonido, así como las computadoras, son otros dispositivos que también contribuyen al consumo energético incluso cuando están en modo de espera. Estos aparatos, a menudo olvidados, pueden aumentar significativamente tu consumo de electricidad si no se apagan completamente.
Para controlar los costos de electricidad y mejorar la eficiencia energética en el hogar, es crucial desenchufar estos dispositivos cuando no se utilizan y considerar opciones para reducir el uso de aparatos con alto consumo. Implementar estas prácticas simples puede hacer una gran diferencia en tu presupuesto mensual y en el impacto ambiental de tu hogar.
