(Lima, marzo 2025). El Ministerio de Vivienda, Construcción y Saneamiento (MVCS) y el Organismo Técnico de la Administración de los Servicios de Saneamiento (OTASS), distribuyeron más de 31 mil metros cúbicos de agua potable en favor de poblaciones vulnerables de 10 regiones del país, a fin de garantizar el acceso a este vital elemento a miles de familias afectadas por las lluvias.
La distribución se realizó con camiones cisterna de una capacidad de 18 y 34 metros cúbicos, vehículos que forman parte de la estrategia Cisternas e Hidrojet del OTASS, que, desde enero, han recorrido más de 22 provincias de dichas regiones, beneficiando a poblaciones en situación de emergencia.
Mediante esta iniciativa se abasteció del recurso vital a las familias de las provincias de Contralmirante Villar (2618 m3), Tumbes (2449 m3) y Zarumilla (18 m3) que han sufrido los embates de la naturaleza. Las unidades continúan recorriendo las zonas más perjudicadas dotando del recurso a quienes más lo necesitan.
Se ha favorecido también a pobladores de las regiones Madre de Dios, Huancavelica, San Martín, Piura, Junín, Lambayeque, Huánuco, Puno y Loreto, cuyas familias vulnerables han sido priorizadas en este reparto de agua potable.
En la provincia de Tocache se distribuyó 4093 m3, Mariscal Cáceres (442 m3) y San Martín 1496 m3; mientras en Huancavelica, 126 m3. En Paita y Talara (Piura) la dotación del recurso fue de 5406 m3 y en Chanchamayo, Junín, Tarma y Huancayo se repartieron 5147 metros cúbicos de agua.
En Chiclayo, la estrategia entregó 306 metros cúbicos, mientras que el distrito de Luyando, ubicado en la provincia de Leoncio Prado y Huánuco, afectados por las lluvias, se asignó 2966 m3. En Juliaca, Puno se proporcionaron 1312 m3 de agua apta para el consumo humano y en Loreto se distribuyeron 3705 metros cúbicos, reparto que favorece a las familias que requieren de este vital elemento.
Con estas acciones, el sector Vivienda, Construcción y Saneamiento reafirma su compromiso de asegurar el abastecimiento de agua potable en las zonas más vulnerables del país, ya que esta estrategia permite atender de manera inmediata a la población, mientras se restablecen los sistemas de distribución afectados por las emergencias, garantizando el acceso a un recurso esencial para la vida y la salud.