Un equipo de arqueólogos dirigido por Rafael Mallco Huarcaya ha realizado un notable descubrimiento en el sitio arqueológico de Huacachina Seca, en el distrito de Pueblo Nuevo, Ica. Los investigadores hallaron fardos funerarios con más de 800 años de antigüedad que pertenecen a la cultura Ika.
El miércoles 4 de septiembre, el equipo desenterró un fardo funerario que contiene los restos de una persona de entre 13 y 16 años. Los restos estaban envueltos en tejidos y acompañados de un ajuar funerario que incluía textiles doblados y una vasija. En una excavación realizada la mañana siguiente, se encontró un segundo fardo funerario de menor tamaño.
Los trabajos, que cuentan con la autorización del Ministerio de Cultura mediante la resolución directoral N° 000362-2024-DCIA-DGPA-VMPCIC/MC, comenzaron a fines de agosto en la zona norte del sitio Huacachina Seca. Mallco Huarcaya destacó que este sitio había sido previamente explorado por el padre de la arqueología científica peruana, Federico Max Uhle, en 1901. Sus hallazgos fueron fundamentales para que la arqueóloga Dorothy Menzel de la Universidad de Berkeley realizara una clasificación tipológica de la cerámica Ika en la década de 1970.
La cultura Ika, que floreció entre los años 1000 y 1470 d.C. en el valle de Ica, es una de las culturas locales más importantes del periodo intermedio tardío en la costa sur central del Perú. El descubrimiento en Huacachina Seca, conocido también como Soniche, sugiere que el sitio funcionó como un espacio funerario importante para la población de la época, y que se encontraba cerca del centro administrativo de Takaraka.
Mallco Huarcaya explicó que el área en cuestión abarca siete hectáreas. El equipo ha seleccionado siete unidades de excavación, de las cuales actualmente están trabajando en dos. El proyecto de investigación está financiado y ejecutado por la consultora Arkeos Perú, con el apoyo de estudiantes de arqueología de la Universidad Nacional San Luis Gonzaga de Ica y la colaboración logística de la Municipalidad Distrital de Pueblo Nuevo.
Este estudio permitirá un entendimiento más profundo del origen y desarrollo de la cultura Ika, que fue ocupada por los incas durante el horizonte tardío. Investigaciones arqueológicas previas realizadas en 2012 revelaron que el centro administrativo de la cultura Ika, Takaraka, contaba con construcciones de carácter político y administrativo, que, con el tiempo, fueron reducidas por la expansión agrícola.