Ricardo Mendoza y Jorge Luna, célebres por su programa de comedia «Hablando Huevadas», se encuentran actualmente en el centro de la atención pública debido a su reciente negativa a interactuar con sus seguidores fuera del ámbito de su espectáculo. Este rechazo incluye negarse a tomarse fotografías, saludar o dar autógrafos a aquellos que los reconocen en las calles. A pesar de registrar un significativo número de vistas en su último episodio, con aproximadamente 120 mil visualizaciones en su canal de YouTube, las polémicas declaraciones de los comediantes a la periodista Véronica Linares tuvieron repercusiones negativas en su base de seguidores, resultando en una pérdida de alrededor de 10 mil suscriptores, según lo señalado por el analista político Juan Moreno.
Ante la disminución de seguidores, Mendoza y Luna decidieron minimizar el impacto de esta situación, enfocándose en resaltar el éxito de su más reciente presentación teatral. Compartieron videos de momentos destacados de su actuación y los elogios recibidos por parte de sus seguidores, buscando contrarrestar la negatividad generada por sus acciones. A pesar de las críticas recibidas, los comediantes mantienen firmemente su postura, reafirmando que su relación es exclusivamente con sus seguidores verdaderos, a quienes definen como aquellos que comprenden y respetan su decisión de mantener cierta distancia con el público fuera de los escenarios.
Las redes sociales se inundaron de opiniones encontradas respecto a la actitud de Mendoza y Luna, quienes se mantuvieron firmes en sus convicciones a través de diferentes plataformas. En un gesto que desafió las expectativas de sus críticos, los comediantes hicieron hincapié en que su compromiso es con sus seguidores genuinos, quienes valoran su trabajo y comprenden su postura. Esta controversia también se manifestó en declaraciones realizadas por los comediantes en un podcast conducido por Véronica Linares, donde reiteraron su postura, señalando que sus verdaderos seguidores entienden su aversión por las interacciones prolongadas fuera de los escenarios.
