En un preocupante aumento, la región Loreto ha reportado cerca de 8.500 casos de malaria, superando las cifras registradas en abril del año anterior. Además, se han registrado dos decesos, uno de un niño y otro de un joven provenientes de zonas alejadas.
El epidemiólogo Carlos Álvarez, del Centro de Prevención de Enfermedades de la Gerencia Regional de Salud de Loreto, estimó que hasta la quincena de abril se habían reportado 8.448 casos y dos fallecidos, lo que representa un aumento del 38% en comparación con el mismo periodo del 2023. Estos casos están focalizados en distritos rurales y de frontera, como Yavarí, Ramón Castilla, Andoas y Pastaza.
Álvarez explicó que la malaria tiene la característica de presentarse en zonas rurales, indígenas y de frontera, a diferencia del dengue que, generalmente, se reporta en zonas urbanas. Para atender a la población afectada, se desplegarán brigadas de salud en las comunidades más afectadas para realizar diagnósticos y proporcionar el tratamiento necesario.
Los síntomas de la malaria incluyen fiebre, dolor de cabeza, malestar y sudoración, además de anemia y decaimiento. Los dos fallecidos en la región, según relató el médico, son un niño que falleció después de rechazar el traslado a un hospital de mayor capacidad y un joven que llegó tarde al servicio médico y no pudo recibir atención oportuna.
