Un incendio de gran magnitud desató el caos en el jirón Áncash, en el corazón del Cercado de Lima. El fuego devoró un edificio, extendiéndose a una construcción vecina, en un siniestro que generó alarma entre los residentes y transeúntes de la zona. Afortunadamente, no se reportaron víctimas fatales ni heridos, aunque las imágenes de densas columnas de humo despertaron el temor entre la población.
La rápida respuesta de 28 unidades del cuerpo de bomberos fue crucial para intentar contener las llamas, que alcanzaron tal intensidad que parte de la estructura se desprendió, complicando aún más la situación. En medio del caos, un adulto mayor quedó atrapado en el interior del edificio en llamas, desencadenando una dramática operación de rescate.
La División Aérea de la Policía Nacional desplegó un helicóptero para descender a los rescatistas y lograr evacuar al hombre de la zona del desastre. Mientras tanto, efectivos policiales se movilizaron para mantener el orden y alejar a los curiosos de la zona de riesgo, garantizando la seguridad del personal de emergencia.
En un esfuerzo conjunto, el Ministerio de Salud desplegó una ambulancia del SAMU con tres profesionales médicos para atender cualquier emergencia que surgiera entre la población afectada. Por su parte, Sedapal se sumó a las labores de apoyo, enviando camiones cisterna y aumentando la presión de agua en los hidrantes cercanos para facilitar el trabajo de los bomberos.