En respuesta al creciente clima de inseguridad que rodea el proceso electoral hacia los comicios del 2026, el Jurado Nacional de Elecciones (JNE) está implementando medidas de protección sin precedentes para su personal, incluyendo la adquisición de chalecos antibalas. Así lo informó el presidente del organismo, Roberto Burneo, quien advirtió que el entorno para los próximos comicios «no va a ser muy seguro».
La decisión se produce tras los recientes ataques armados contra el precandidato presidencial Rafael Belaúnde y otros postulantes, hechos que el titular del JNE calificó como «acciones concretas y preocupantes». Burneo señaló que, ante esta situación, el organismo ha iniciado de manera prioritaria un proceso de identificación de riesgos y conflictos.
«El JNE viene adquiriendo chalecos antibalas para nuestro personal, para los jurados especiales. Estamos en ese proceso de evaluación y adquisición porque no podemos escatimar en las medidas de seguridad para nuestro personal, para los candidatos y para toda la población que va a acudir a elecciones», precisó el funcionario.
Sin embargo, Burneo aclaró que estos dispositivos de protección corporal no serán entregados directamente por el JNE a todos los involucrados. Por ello, hizo un llamado enérgico a las demás autoridades: «Invocamos a las autoridades del Poder Legislativo y Ejecutivo tomen esas medidas y no escatimen esfuerzos», ya sea facilitando chalecos antibalas «u otras medidas más potentes».
El presidente del organismo electoral consideró «conveniente» que se activen y adelanten todos los protocolos de seguridad establecidos. La violencia política, subrayó, hace «necesario redoblar las medidas respectivas» para garantizar la integridad no solo de los candidatos y funcionarios electorales, sino también de la ciudadanía que ejercerá su derecho al voto.
Esta advertencia y las medidas anunciadas marcan un tono de alerta máxima de cara a las Elecciones Generales del 2026, reflejando la preocupación institucional por una posible escalada de violencia que podría poner en riesgo el normal desarrollo de los comicios.





