Un reciente estudio revela que solo uno de cada cuatro jóvenes de la Generación Z en Perú comprende el concepto de historial crediticio, una herramienta fundamental para el acceso responsable al crédito. Esta situación es preocupante, dado que el manejo inadecuado de deudas y la falta de educación financiera pueden tener un impacto negativo en su futuro económico.
La investigación sugiere que muchos jóvenes se endeudan principalmente para adquirir productos de moda y tecnología, indicando un patrón de consumo que se encuentra más orientado hacia tendencias y el estatus social que hacia la satisfacción de necesidades financieras básicas o inversiones a largo plazo. Este comportamiento puede provocar dificultades financieras significativas si no se controla adecuadamente.
Además, es evidente un cambio en la forma en que la Generación Z maneja su dinero. Este grupo prefiere utilizar métodos de pago digitales y móviles en lugar de optar por tarjetas de crédito tradicionales. Esta inclinación hacia lo digital no solo transforma su relación con el dinero, sino que también plantea nuevos retos para la educación financiera y las políticas de crédito dirigidas a esta generación.
Ante esta realidad, es esencial impulsar programas de educación financiera que ayuden a los jóvenes a gestionar mejor sus finanzas. La falta de comprensión sobre conceptos básicos, como el historial crediticio, puede llevar a decisiones financieras desinformadas y a una acumulación innecesaria de deudas. En este sentido, fortalecer la formación financiera es un paso crucial para prevenir el consumo irresponsable y el uso inapropiado del crédito.
Por lo tanto, se hace necesaria una mayor concienciación y educación en temas financieros entre los jóvenes. Construir una base sólida en educación financiera les permitirá no solo evitar deudas innecesarias, sino también establecer una estabilidad económica que les acompañe a lo largo de sus vidas.
La generación más joven debe ser dotada de herramientas y conocimientos para navegar el complejo mundo de las finanzas, asegurando una mejor calidad de vida en el futuro.
Fuente: Infobae









