Perú mantiene esperanzas matemáticas para el repechaje al Mundial 2026
La Selección Peruana aún alberga una mínima posibilidad matemática de clasificar al repechaje del Mundial 2026, a pesar de encontrarse en una posición complicada en las Eliminatorias Sudamericanas. Actualmente, el equipo nacional suma solo 12 puntos y ocupa el penúltimo lugar en la tabla general.
Para que Perú mantenga vivo su sueño de disputar el repechaje, debe lograr un par de victorias en sus próximos partidos: el primero, contra Uruguay en Montevideo, y el segundo, ante Paraguay en Lima. Sin embargo, la clasificación no depende únicamente de los resultados de la blanquirroja, sino que también debe esperar que sus rivales directos, Venezuela y Bolivia, no sumen puntos. En particular, Venezuela, que cuenta con 18 puntos, necesita perder en ambos encuentros, mientras que Bolivia, con 17 puntos, no debe obtener más de un punto en sus próximos enfrentamientos.
Incluso si Perú logra obtener las dos victorias, deberá superar a Venezuela en la tabla. Esto implica que la Vinotinto no solo debe perder, sino hacerlo con una diferencia considerable de goles. La clasificación a la Copa del Mundo también utiliza la diferencia de goles como criterio de desempate, por lo que este aspecto es crucial para el equipo peruano.
La situación de Perú se complica aún más debido a que otros equipos ya han asegurado su clasificación directa, lo que agudiza la competencia por el séptimo lugar, que actualmente ocupan Venezuela y Bolivia. De esta manera, el equipo peruano está a la espera de un verdadero milagro matemático en la recta final de las Eliminatorias.
Los partidos clave que definirán el futuro de Perú son:
- Uruguay vs Perú (en Montevideo)
- Paraguay vs Perú (en Lima)
En resumen, la Selección Peruana debe conseguir obligatoriamente las victorias en estos encuentros y esperar resultados favorables en los partidos de sus rivales. Esta combinación refleja la dificultad y la presión que enfrenta el equipo dirigido por Óscar Ibáñez en esta crucial fase de las Eliminatorias.
Fuente: La Republica
